miércoles, 2 de noviembre de 2011

trabjo final:4 bimestre:johannes hessen y teoria del concomiento

Colegio Colombo Americano
Camilo Villamizar Rubiano
Filosofía
Trabajo final
Juan Carlos Ángel
10B
2011


Racionalismo vs empirismo: por el origen y rigor del conocimiento


¿El conocimiento, partiendo de una posición del hombre en capacidad de inferirla y abordarla, se rige y tiene origen bajo qué campo, la experiencia o la razón? El conocimiento es la cuestión de criterio de la verdad, que se rige ante los principios universales y al valor de verdadero o falso que se le da a la misma, es esencial en el acceso al mundo y se define como la concordancia de la imagen con el objeto. Saltando el debacle entre dogmatismo, escepticismo y subjetivismo, en donde se pone en cuestión la existencia de la verdad, se da un choque de relaciones sujeto-objeto y se debate la capacidad del hombre de concretarla; llega a nosotros un nuevo planteamiento, una nueva divergencia entre racionalismo y empirismo, estimulada ante dividir en dos el objeto que nos llega, frente al origen y justificación del conocimiento “Dividimos los objetos en reales e ideales. Llamamos real a todo lo que nos es dado en la experiencia externa o interna o se infiere de ella. Los objetos ideales se presentan, por el contrario, como irreales, como meramente pensados.”1


En primer momento es debido estudiar la razón como fuente principal y eje de origen del conocimiento. Frente al racionalismo, la verdad del conocimiento necesitada de una validez, clama por la lógica como respuesta a esos juicios. La idea de conocimiento forjado por el pensamiento conceptual y deductivo ha sido defendido desde Plotino y san Agustín, argumentando a la experiencia como inferior al saber o iluminación divina, pasando por descartes y su teoría de las ideas innatas, hasta llegar a Spinoza que asegura que su nivel ético corresponde a vivir de acuerdo a la razón, la cual bajo su magnitud iluminada estructura al mundo. Esté racionalismo tiene como soporte áreas del pensamiento como la matemática, la cual justifica la razón como verdad única. “Una forma determinada del conocimiento ha servido evidentemente de modelo a la interpretación racionalista del conocimiento. No es difícil decir cuál es: es el conocimiento matemático. Este es, en efecto, un conocimiento predominantemente conceptual y deductivo”.2


Por el otro lado encontramos el empirismo, un antípodo del racionalismo, que bajo ideas de Locke, que presenta una oposición certera a las ideas innatas, nos habla de la experiencia mas los sentidos como clave del conocimiento; ideas de Hobbes, de una subsistencia que trasciende mas allá de las sensaciones y define la ciencia, e ideas de Berkeley, sobre una negación de la sustancia material para la aparición y dominio de las sustancias espirituales que reduce la ciencia a lo sensible. El empirismo, donde el fundamento de verdad es experiencia, define el conocimiento como lo que el hombre a adquirido a lo largo de los años, partiendo de hechos concretos y siguiendo una cadena de percepciones, representaciones y conceptos. “La conciencia cognoscente no saca sus contenidos de la razón, sino exclusivamente de la experiencia. El espíritu humano está por naturaleza vacío; es una tabula rasa, una hoja por escribir y en la que escribe la experiencia. Todos nuestros conceptos, incluso los más generales y abstractos, proceden de la experiencia.” 3 A diferencia de una relación con las matemáticas, los empiristas llevan una relación con las ciencias sociales.


Encontramos un debacle de posiciones y corrientes entre los que aseguran que el origen del conocimiento y criterio de verdad se encuentra en la experiencia con los que piensan que se encuentra en la razon. A pesar de este dualismo tan marcado, podemos decir que la verdad, como base de trascendencia en el objeto, puede ser resultado y puede ser encontrada a partir de la integración de estas dos corrientes, es decir de la suma de una conciencia ingenua y una conciencia científica, hablamos de una relación complementaria que permite al hombre abordar el mundo y darle un criterio y juicio de verdadero o falso a afirmaciones; para llegar a la certeza de la verdad, base del problema del conocimiento, podemos complementar la intuicion y la experiencia con lo racional, podemos complementar el conocimiento espiritual y el ser supible, y dejar a un lado y ponerle punto final a los historicos y constantes choques entre las dos corrientes. “Quien, por ejemplo, vea en el pensamiento humano, en la razón, la única base de conocimiento, estará convencido de la especificidad y autonomía psicológicas de los procesos del pensamiento. A la inversa, aquel que funde todo conocimiento en la experiencia, negará la autonomía del pensamiento, incluso en sentido psicológico." 4

1. Hessen, Johannes. Teoría del conocimiento
2. Hessen, Johannes. Teoría del conocimiento
3. Hessen, Johannes. Teoría del conocimiento
4. Hessen, Johannes. Teoría del conocimiento 

Hessen, Johannes. Teoría del conocimientoHessen, Johannes. Teoría del conocimiento

domingo, 9 de octubre de 2011

sintesis: segunda parte teoría del conocimiento (Johan Hessen)

Hessen nos introduce a la complejidad de la teoría especial del conocimiento, complementaria de una teoría general, que bajo parámetros del pensamiento verdadero y significación de objetivos del pensamiento, hace una ardua investigación que intenta descifrar el origen lógico y validez de las formas de pensamiento, abordado de unas categorías, elementos usados de guía para descubrir conceptos puros del entendimiento y  que entablan una relación de conciencia y ser. La dualidad de categorías, una lucha entre Aristóteles, su objetivismo y realismo critico, frente a Kant y su idealismo, juicio del entendimiento y conciencia productora de objetos; abre la brecha hacia un nuevo sistema de categorías, mezcladas entre la lógica, psicología y la reflexión. se nos hace referencia a una substancialidad, eje independiente y  objeto permanente y estable, cuya relación y dualismo con accidente constituyen subsistencia e inherencia y a una causalidad, principio que se mueve bajo un laso causal y bajo el debate sobre si todo cambio viene de una causa y si la existencia del ser es determinada por la existencia de otro. Bajo esta oscilación de categorías, teorías y juicios se mueve la relación de ser y fe.

jueves, 29 de septiembre de 2011

Sintesis: "teoria del conocimiento" Johannes Hessen

El conocimiento, el misterioso fenómeno de la conciencia, es sin duda un eje de estudio que ha llevado a la articulación de varias corrientes ideológicas y filosóficas que han trabajado de distintas maneras el dualismo constante de sujeto y objeto, cuya búsqueda insaciable es por determinar las ideas sobre verdad, el criterio de esta verdad y acompañar la misión de la teoría del conocimiento, que adentrándonos en el viaje que nos propuso Hesse en su aclamado libro, se refiere a la articulación de una concepción natural forjadora de conciencia, que se convierte en la base de una interpretación filosófica y que busca conducir, mas no resolver, el problema del conocimiento. El libro la teoría del conocimiento se convierte en un mapa para entender los sinsentidos, posiciones y transiciones a través de la historia de los movimientos y métodos que surgen a partir del problema de conocimiento que articulan unos criterios de verdad, error,  juicio, razón y experiencia, y los jerarquerizan y les añaden una importancia, que pone en tela de juicio la conciencia natural y el dualismo previamente marcado (sujeto y objeto), buscando encontrar una aproximación a lo que la lógica, psicología y ontología no pudieron resolver.

En un primer momento Hessen analiza la posibilidad de conocimiento con las formas de contacto que se le ha dado al sujeto y objeto. Hablamos en primera instancia del dogmatismo, donde en un contexto regido por el ser y la naturaleza el conocimiento no tiene un problema, donde el sujeto aprehende al objeto y donde el hombre ingenuo confía en su excesiva capacidad de razonamiento humano. Luego hablamos de un esceptismo que en si es un antípodo del dogmatismo, donde hay una negación de posibilidad de conocimiento, no hay ninguna verdad y donde rige la duda. Luego hablamos de un subjetivismo y relativismo bajo la limitación de la verdad, a una no universal sino relativa dependiendo de donde se manejen, y finalmente hablamos del pragmatismo (verdad asociada a algo útil y libre voluntad) y el criticismo (oscilación entre dogmatismo y escepticismo). Luego Hessen nos propone un declive entre si es la experiencia o el pensamiento el que rige el conocimiento (lo lógico o lo psicológico). Nos habla primero de un racionalismo, donde la razón es fuente esencial del conocimiento (necesidad lógica), de un modelo empírico donde el conocimiento es experiencia y se sigue una cadena de percepción, representación y conceptos, donde se le da vida a la tabula raza que es el hombre, un intelectualismo (oscilación entre pensamiento y experiencia) y finalmente el apriorismo, que es otra oscilación pero con una inclinación hacia el empirismo, oponiéndose al intelectualismo.


Hessen de una manera muy directa nos lleva a preguntar por la jerarquización, si se podría categorizar de esa forma, del sujeto y del objeto, construyendo así una esencia y relación directa entre los 2 factores. Encontramos primeros las soluciones premetafisicas, donde se habla del objetivismo, donde los objetos son los que predomina y los que se entienden por cosas concretas, luego encontramos el subjetivismo que busca construir el conocimiento en el sujeto; luego encontramos las soluciones metafísicas, como el realismo donde hay cosas reales independientes de la conciencia y cuya percepción e idea a evolucionado a lo largo de los años llegando de un realismo netamente ingenuo hasta uno netamente critico donde la realidad descansa en la vivencia inmediata. Luego hablamos de un idealismo donde solo quedan los objetos de la conciencia y del conocimiento argumentando un encadenamiento de juicios y la limitación del sentir. Por ultimo hablamos del fenomenalismo que en si se categoriza como una mediación de realismo y idealismo, donde predomina el misterio y las percepciones. Añadido a las anteriores soluciones encontramos las teológicas, inmersas mas en un dualismo directo de los objetos previamente estudiados (monista y panteísta / dualista y teísta). hessen nos hace un nuevo incapie, nos dice que hay algo mas alla del conocimeinto racional, hay mas espacios de conocer, abriendo la brecha a una lucha entre la intuicion y lo racional, Ahora bien el conocimiento es un termino tan amplio y tan trabajado que se llega a considerar como, en aras del saber, el aprender espiritualmente un objeto. Hablamos del comprender la esencia del alma, de una manera netamente discursiva y sujeta al movimiento, donde la capacidad de recepción de sensaciones y de traducir el exterior del hombre, le permite hacer juicios sobre las leyes lógicas, hablamos de que el hombre conoce viendo. Claro que se puede rechazar este modelo intuitivo quedándose en un plano y mapa lógico racional y netamente teórico.

Existe la necesidad de tener certeza sobre la misma verdad, dentro de la complejidad de la satisfacción del hombre, el conocimiento y la realidad, se busca justificar la concordancia de la verdad en el pensamiento mismo y la del pensamiento con el objeto. Cuando se logra articular el concepto trascendente de la verdad y teniendo clara la concordancia de la verdad en la conciencia natural y el ámbito lógico se puede articular una idea de la verdad del objeto, con la ayuda de la realización de un juicio que complemente todo lo anteriormente dicho. Adyacente al concepto de verdad, el criterio de verdad encuentra su auge en la concordancia del pensamiento mismo y en una nula contradicción articulando una verdad estable sin oposiciones.

domingo, 28 de agosto de 2011

Trabjao Final. pregunta

Colegio Colombo Americano
Camilo Villamizar Rubiano
Filosofía
Trabajo final
10b
2011
¿De que forma la ciencia se convirtió en un factor inconcluso y en un obstáculo frente a la antropología filosófica y su trabajo de comprender el verdadero ser y la función existencial del hombre? La ciencia tomo la bandera como utensilio de explicación de la grandeza del hombre y factor que sacaría de la miseria al individuo, pero después de ese esfuerzo, la ciencia quedo reducida frente a la crisis de identidad del hombre que se ve marginado ante la cultura moderna y que sufre por el no reconocimiento de sus dimensiones personales. Dentro del mundo mecánico del hombre, la ciencia suporta a la alteración de la dinamicidad del ser humano, claro está, que esta idea sufre un dualismo de opiniones en los que ven en la ciencia el utensilio de explicación del factor de complejidad del hombre  y otros que ven en la ciencia el alimento a un mundo inhabitable y factor que vuelve lento la función antropológica de entender el sentido mismo y la función existencial del hombre. Para entender la relación ya sea benigna o maligna de la ciencia y la antropología filosófica necesitamos entender que es la antropología filosófica: “La antropología filosófica es la disciplina que toma al hombre como objeto de su investigación, en el intento de aclarar y de establecer en cierto modo su ser, esto es, los aspectos fundamentales de su esencia o naturaleza.”[1]  

Es necesario mirar ambos lados de este tema, cuestión que da luz verde a confrontaciones que tenemos que tomar en cuenta, miremos en primera instancia la ciencia que un plano netamente ideal responde a las inquietudes de la existencia humana. Una ciencia necesaria, que de una mirada positivista la percibe como un poder coordinador y como la herramienta que permite alcanzar el anhelo del dominio de la naturaleza y resolver los problemas que aquejan al hombre para incitar al desarrollo. La ciencia como la conocemos hoy en día cuyo origen data de los albores del renacimiento mismo se ramifica buscando explicar la dinamiza y grandeza humana. Intentan aclarar la enorme complejidad del comportamiento humana y proporcionar los instrumentos necesarios y utilizables para regular el hombre.”[2]

Ahora bien, es debido estudiar aquellas ideas  en las que se la hace una acusación directa a la ciencia como un bache en el camino para el trabajo solucionador de la antropología que lucha por darle respuesta a esos interrogantes esenciales que hasta ahora parecen no tener solución. Es debido reconocer el escenario del cuestionamiento de la ciencia, donde pierde valor hacia finales de la segunda guerra mundial y que se vio como un utensilio que se puso en nuestra contra y que bajo la tragedia en los campos de concertación se convirtió en un monstruo a temer. Nos enfrentamos a la idea de que la ciencia se convirtió en un enemigo del hombre, en una maquina que mata, en una herramienta de sometimiento a las personas y que nos quita posibilidades de desarrollar condiciones humanas. Hablamos directamente de una destrucción identitaria y limitadora de condiciones de desarrollo del hombre por parte de la ciencia. “Un mundo dominado únicamente por la ciencia y por la técnica podría incluso revelarse como inhabitable, y esto no solo desde el punto de vista biológico, sino sobre todo del puto de vista cultural y espiritual”[3].

Las ideas de una herramienta que ha permitido conocer al hombre loe que hace muchos años era un misterio inalcanzable lucha contra las ideas de algo que se convirtió en un agresor, que no solo se convirtió en un enemigo del hombre sino en un objetivo inconcluso a responder a preguntas existenciales de la humanidad quitándole lustre a la tarea de la antropología filosófica. Bueno esto es lo que afirman algunos autores insatisfechos que “Toman sus distancias respecto a la fe absoluta en las ciencias; están convencidos de que hay en el hombre ciertos problemas que jamás podrán comprenderse y menos todavía resolverse a través de cambios externos y puramente materiales”. [4]Finalizo diciendo que el gran misterio de hombre, de su ser, de su función existencial y de su dimensión tanto individual como grupal es una tarea muy difícil de cumplir y menos cuando los intentos de la antropología filosófica se ven frenados por la decaída de la ciencia no como método de respuesta sino por su uso destructible que le da al hombre, claro esta que el planteamiento siempre estará ahí abierto a un mar de posibilidades en constante choque.



[1] Gevaert, J. (1997), El problema del hombre
[2] Gevaert, J. (1997), El problema del hombre
[3] Gevaert, J. (1997), El problema del hombre
[4] Gevaert, J. (1997), El problema del hombre

martes, 9 de agosto de 2011

sintesis: Cassirer, E. antropología filosofica

Cassirer comienza abordando nuevas concepciones del sentido del ser mismo y la necesidad de abordar al hombre desde su vida politica social y individual .Desde Platón la filosofía toma el papel de descifrador del problema de la ampliación del sentido de la naturaleza humana, que en un periodo se vio dispuesta a ser estudiada por una teoría del estado que sucumbió al dejar a un lado otros caracteres que definen la existencia humana y que no estaban subscritos a su principio de organización. Ante la ineficacia del anterior, asumimos el método positivista ligado a una psicología histórica de Comte donde es la humanidad la que explica al humano, pero que resulta insuficiente ante la grandeza de la naturaleza humana .En respuesta al problema de fisiología y ciencia social como fenómenos diferentes surge la teoría naturalista que busca evitar el dualismo metafísico pero reduce al hombre a una serie de instintos primarios y categorizables. Frente al debacle de ineficacia de métodos previamente descritos, se busca comprender a un hombre funcional, entender las condicones espaciales del humano y los principios que la componen, articular la llegada a un origen común de las líneas funcionales y básicas del hombre; claro esta que la filosofía antropologica y sus métodos quedan estancados de nuevo ya que nos enfrentamos a la improbabilidad de encontrar un denominador común en los fundamentos culturales y a la imposibilad de llegar a la anhelada unidad de acción y bien común, comprendiendo el sueño lejano llamado: verdad del conocimiento humano.

Síntesis: Hobbes, Th. El Leviatán

Frente a la condición de igualdad del hombre nace el egoísmo, alimentando la idea que supone que la existencia del hombre se basa en la gobernación de su propia razón y el necesario dominio sobre los otros, argumentando una naturaleza humana basada en la competencia y desconfianza que producen la naturaleza de guerra, la virtud de lucha y la destrucción mutua. Frente a esta naturaleza del hombre Hobbes hace la entrada al derecho y ley de la naturaleza donde se evidencia la libertad de poder que bloquea la articulación de la guerra y la paz; paz, que se ve limitada ante la negación del hombre de renunciar a sus derechos que le otorgan seguridad. Frente a la guerra como producto de naturaleza humana, surgen las ideas de leyes en función del desenvolvimiento propio del hombre. Ante esto, arriba el contrato, promesa inquebrantable que toma carácter de pacto o de liberalidad, donde hablamos de la traslación y cambio de derechos, que están inscriptos en signos y en leyes naturales que determinan su validez, que se alimenta de los ojos de su religión, del temor y de posibles consecuencias, y que se ve diluido ante cualquier sospecha.

Síntesis: Descartes, R. meditaciones metafísicas (Pág. 101-112):

Descartes despliega una reflexión frente a la existencia del si mismo aplicando la duda como mecanismo de llegada a lo seguro. Emprendemos un viaje en el que los sentidos, la imaginación y la ciencia pierden validez categorizandose como cuestiones falsas que luego sufrirían una transformación de lo antiguo a lo nuevo y seguro, nos enfrentamos frente a la necesidad de convencerse a uno mismo de las ideas, de comprender aquella base real de la que se sostiene el resto de la vida, de comprender la importancia del soñar e imaginar para lograr el pensar y de la razón para llegar a dudar. Frente a la limitación de la naturaleza humana y el problema del engaño, necesitamos darle seguridad al pensamiento como articulador de lo real y darle equilibrio a las reflexiones y principios. Sin dudar de la bondad de un dios categoríal y afianzando el carácter individual de la conciencia humana desde la razón, descartes nos lleva a preguntar ¿ el soñar y el pensar son juicios de categorizar la realidad?